La Ruta Spondylus: Ecuador más allá del Amazonas.
Atardecer en una de las playas de la Ruta Spondylus, en Ecuador. Pixabay, carlosalbertony
Son 600 kilómetros de
playa en el océano Pacífico, a través de las provincias de Esmeraldas, Manabí,
Santa Elena, Guayas y El Oro.
Ecuador es considerado uno
de los países con mayor diversidad en el planeta. A esta nación llegan una
media de 100.000 personas por mes para hacer turismo, según datos del
Ministerio de Turismo, que ha indicado que en 2016 ingresaron al país 1,3
millones de turistas y en 2015 lo hicieron 1,5 millones.
Pero no todos esos
turistas se van al Amazonas, a ver la tan nombrada diversidad, muchos realmente
vienen a hacer la Ruta Spondylus, un extenso recorrido a lo largo de la costa
del Pacífico, donde además de disfrutar de las playas, se pueden adentrar en la
historia y arqueología de algunas de las culturas ancestrales del país.
Letrero en la ciudad de Manta, provincia de Manabí, Ecuador. Pixabay, alejomiranda.
La ruta abarca 600
kilómetros de playas en las provincias de Esmeraldas, Manabí, Santa Elena,
Guayas e incluso El Oro y se llama Spondylus por un 'molusco' o 'concha' del
lugar, considerado sagrado por las culturas nativas y que hoy se encuentra en
peligro de extinción.
¿Qué hacer?
Además de ir a las playas,
que es la principal atracción de visitar la Ruta Spondylus, los turistas pueden
hacer otras actividades, que el Ministerio de Turismo de Ecuador ha plasmado en
una extensa lista.
Avistamiento de ballenas
Una de las principales
razones por las que la Ruta Spondylus recibe a tantos turistas es por el
avistamiento de ballenas jorobadas. Entre junio y septiembre se pueden ver en
algunos puntos de la ruta a estos gigantes mamíferos acuáticos que escogen las
costas ecuatorianas para su apareamiento y reproducción.
A Puerto López llegan las
primeras ballenas juveniles.
Unas 6.000 ballenas llegan
progresivamente hasta estas aguas. Los lugares más recomendados para avistar
son Puerto López e Isla de la Plata, provincia de Manabí; Salinas, en Santa
Elena; y Atacames y Súa, en Esmeraldas.
Ir de fiesta y hacer
deportes
En Montañita,
especialmente, hay fiesta todos los días del año, por ello es quizás el destino
más visitado por los turistas. Pero la rumba también se hace en otros lugares
como Salinas y Playas (General Villamil, provincia de Guayas).
Montañita, provincia de Santa Elena, Ecuador. Pixabay, charteweb.
En la Ruta Spondylus se
practica surf, buceo, kayak, parapente, descenso de montaña, senderismo,
ciclonauta, esquí acuático, paracaídas, moto acuática y más. Quienes ofrecen
estos servicios están todo el año en la zona.
Comida costeña y conocer a
los ancestros
En Ecuador, la comida
costeña es la que más fama tiene; predominan los pescados y mariscos,
combinados con el plátano verde, famoso a nivel mundial.
También hay museos que
cuentan la historia de los ancestros que habitaron la zona, entre ellos
habitantes de las culturas Valdivia, Manteño y Las Vegas, entre otras. Hay
sitios arqueológicos y excavaciones que exponen más de 11.000 años de historia.
Destinos más visitados de
Spondylus
En la provincia de
Esmeraldas están las playas de Mompiche, Same, Atacames, Súa y Tonsupa. También
está la isla de Muisne, un pueblo de afro ecuatorianos que se dedican a la
pesca, muy abiertos a las visitas de los turistas.
Playa de Atacames y Tonsupa.
La señora Cristina
Carranza, quien vende choclos (mazorcas de maíz) en el bulevar de Tonsupa, dice
que ese balneario solo "se llena en temporadas altas", el resto del
año es un lugar apacible.
Pedernales, provincia de Manabí, Ecuador. Pixabay gmcpcp0.
En Manabí las opciones
para disfrutar aumentan, comenzando por Puerto López, que funciona como punto
de partida para las excursiones por el Parque Nacional Machalilla, una de las
áreas protegidas más grandes de Ecuador. Están también la Isla de la Plata,
conocida como la pequeña Galápagos; Los Frailes, una playa de aguas mansas;
Puerto Cayo, que además de playa tiene cascadas, montañas y bosques húmedos;
Manta, donde hubo hasta 2009 una base militar estadounidense; Montecristi, el
pueblo donde verdaderamente se fabrican los sombreros de paja toquilla,
conocidos a nivel mundial como Panama Hat; Bahía de Caráquez, donde se puede
practicar surf, kayak, windsurfing y esquí acuático; y Pedernales, que ofrece
las mejores vistas de una hermosa playa para los turistas.
Sombreros hechos en Montecristi, Ecuador (mal llamados Panama Hats).
El joven Ronald Cantos
recomienda esta provincia porque —según él— quien la visita "se
enamora", tanto de las playas, como de su "variedad
gastronómica", que de hecho es el tipo de comida más comercializada en
todo el país.
Puerto López, provincia de Manabí, Ecuador. Pixabay 12019.
En la provincia de Santa
Elena está la población de Salinas, con buenas playas, entre ellas la
Chocolatera —el punto más sobresaliente de Sudamérica en el Pacífico— y las
piscinas de Ecuasal, pozos de sal, que justamente dan el nombre a la ciudad.
También está Montañita, la ciudad más movida de todo Ecuador y donde se
realizan campeonatos internacionales de surf. En esta provincia se puede
visitar además la Playa de Olón y llegar hasta el cangrejal, donde hay especies
en peligro de extinción, como el cangrejo azul.
Playa de Olón.
Durante el feriado de
carnaval, el ecuatoriano Hipólito Muñoz, opinó que Salinas fue justamente el
lugar de "farra, gastronomía y paseos acuáticos", para el
"recogijo de la muchedumbre" que apostó por este destino.
Por su parte, María de los
Ángeles Loor ha opinado sobre Montañita, a la que considera un lugar
"donde puedes hacer lo que quieras a la hora que quieras y nadie te ve
mal". Se disfruta también de ver "muchos caracoles, cangrejitos y
corales".
Salinas, provincia de Santa Elena, Ecuador. Edgar Romero RT.
En Guayas está Playas, el
balneario más cercano de la ciudad de Guayaquil, a unos 90 kilómetros de
distancia.
Playas, General Villamil.
En la provincia de El Oro,
que poco es reseñada en los mapas de la Ruta Spondylus, está la isla Jambelí y
la playa de Bajo Alto, los lugares más concurridos de este distrito.
Playa de Jambelí.
Últimos consejos
Para pasear por esta ruta
es necesario llevar ropa ligera, trajes de baño, cámara fotográfica —para
capturar los increíbles paisajes—, protector solar, gafas de sol y binoculares.
La Ruta Spondylus se puede
hacer en carro particular, para tener mayor facilidad de adentrarse a las
playas más recónditas; sin embargo, no es una limitante no contar con vehículo
privado, porque hay autobuses que cubren todo el recorrido.
Fuente: Edgar Romero, RT.
Revisión y Diseño: elcofresito.
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