La sanidad en EE.UU. es tan cara que las empresas ya prefieren pagar tratamientos en el extranjero
De las singularidades de Estados Unidos que resultan muy
impactantes a ojos del europeo es su sistema sanitario. Disfuncional por
definición, los gastos médicos del país superan con mucho los de otros estados
occidentales, ofreciendo tasas de cobertura más bajas, una esperanza de vida
menor, y tratamientos mucho más caros. Tan caros, de hecho, que las empresas,
las principales encargadas de cubrir los gastos sanitarios de los
estadounidenses, están explorando una vía casi surrealista: pagar viajes al
extranjero. Para abaratar costos.
¿Cuánto? Casi a la mitad. Lo explica este reportaje de The New
York Times, en el que un periodista sigue los pasos de Donna Ferguson, cubierta
por la empresa de su marido Ashley Furniture Industries, quién necesitada de
una cirugía de rodilla. La operación se realiza en el hospital Galenia de
Cancún, en México, y la compañía cubre todos los gastos: el traslado, la
estancia, $5.000 en efectivo para costear el tratamiento, y los emolumentos del
cirujano, un especialista estadounidense trasladado para la ocasión.
Tan compleja operación logística (hospital extranjero,
dos vuelos, dietas, etcétera) resulta más barata que operar en Estados Unidos.
Cifras. ¿Inexplicable? No tanto si prestamos atención a los
números. Una operación como la requerida por Ferguson asciende a los $30.000 en
Estados Unidos, mientras que en México no supera los $12.000. La habitación del
hospital en el país anglosajón puede costar por encima de los $2.000 la noche,
mientras que en el Galenia se queda en los $300. El propio implante de su
rodilla es más barato: unos $8.000 en Estados Unidos, por los $3.500 del país
vecino. Casi todos los precios se reducen por encima del 50%.
No sólo se trata de la disparidad de riqueza entre
ambos estados. Es una tendencia generalizada. Operarse en Europa de un
reemplazo de cadera cuesta al asegurador entre 8.000€ y 20.000€; entre un 30% y
un 80% más barato que al otro lado del charco.
Lógica. ¿Lo más alucinante? El médico cobra más en México que
en Estados Unidos: unos $2.700 por la intervención, tres veces más de lo que
acostumbra a remunerar Medicare, el pagador más grande del sistema sanitario
estadounidense. Tanto para el especialista como para la empresa tiene sentido
un traslado exprés a Cancún: uno gana más; la otra paga menos. Y en el camino,
los pacientes tienen la seguridad de una intervención efectuada por un médico
que habla su idioma y proviene de su país.
Tendencia. El Galenia forma parte de una red de hospitales
estandarizados a los mismos requisitos de seguridad y calidad que los
estadounidenses. El cirujano opera con ayuda de un equipo médico local. Es una
tendencia al alza: redes como North American Specialty Hospital ya están
institucionalizando el turismo sanitario como un negocio específico,
transparente, con tarifas claras y en condiciones cristalinas. La incertidumbre
puede frenar a algunos pacientes o empleadores; hay una oportunidad de negocio
si pagando menos puedes ganar más.
Otros casos. No son los únicos. Iniciativas como Doctour, como
vimos en su día, ponen en contacto a pacientes y médicos especializados para
operaciones en el extranjero. Es la consumación de dos negocios, el turismo y
los servicios sanitarios. La aplicación enlaza ambos, similar a un AirBnb de
las redes hospitalarias, y plantea las intervenciones en el extranjero como una
ganga (lo son en comparación a las estadounidenses) y como una oportunidad de
hacer turismo (¿qué mejor que pasar la convalecencia en una preciosa playa
croata?).
Era cuestión de tiempo que las empresas
estadounidenses cayeran en la cuenta. Ashley Furniture Industries es de las
primeras en experimentar con este modelo, y decenas de empleados ya han probado
suerte en México y Costa Rica. Desde que iniciara el programa, afirma haber
ahorrado más de $3 millones.
Como adicional algunos costos que pueden variar:
Referencias: Mohorte, Magnet
Imagen: Sharon MacCutcheo/Unsplash
Comentarios
Publicar un comentario
Todos los comentarios deberán guardar el respeto y la consideración hacia los demás, así como el uso de términos adecuados para explicar una situación. De no cumplirse con estos requisitos los comentarios serán borrados.