Alonso de Ojeda, el primer español en América del Sur
El 18 de mayo de 1499 zarpó del Puerto de Santa María
la expedición de Alonso de Ojeda que tuvo como objetivo explorar las costas de
Tierra Firme americana (continental). En el viaje lo acompañan dos hombres
fundamentales en la historia americana: Américo Vespuccio y Juan de la Cosa, y
será en esta expedición cuando nazca el nombre de un gran país: Venezuela.
El conquense Alonso de Ojeda participó siendo muy
joven en las tropas que luchaban por la reconquista de Granada trabando amistad
con un personaje que sería clave en su futuro:
Juan Rodríguez Fonseca, capellán real, obispo de Badajoz, Córdoba,
Palencia y Burgos y presidente de la Junta de Indias (posterior Consejo de
Indias), organismo administrador de la política colonial castellana en las
Indias.
Gracias a los oficios de Fonseca Ojeda consiguió
formar parte del Segundo Viaje de Colón durante el cual se exploró la región de
Cibao en la Isla de La Española, obteniéndose en tal lugar primeras muestras
del oro de las Indias enviadas por Colón a los Reyes Católicos, junto con un
memorial donde ensalzaba la riqueza de las islas descubiertas. En la provincia
de Maguana, capturó al cacique local sublevado llamado Caonabó de una forma
ingeniosa: Ojeda concertó una entrevista con él y en el transcurso de la misma
que mantuvieron le ofreció como regalo unos grilletes de latón. Cuando Caonabó
se vio inmovilizado, lo subió a su caballo y se lo llevó ante Cristóbal Colón.
Tras enemistarse con Colón, en 1497 Ojeda estaba de
regreso en España donde se aprovechó de la desfavorable coyuntura en que se
encontraba Colón por la desconfianza generada en la Corte por sus actos y
nuevamente de la influencia del Obispo Fonseca del que obtuvo la misión real de
comandar una expedición al Nuevo Mundo con la finalidad de comprobar y
certificar las actuaciones y descubrimientos de Colón. Fue una de las primeras
personas a la que se le autorizó el viaje a las Indias rompiendo el “monopolio”
de los Colón.
El viaje de Alonso de Ojeda
La expedición de Alonso de Ojeda se inició en el Puerto
de Santa María el 18 de mayo de 1499, desde donde se encaminó a la costa
africana. Posteriormente fue acusado Ojeda de haber vendido armas y pólvora a
los moros de Safi (Marruecos) y de haberse apropiado de diferentes bastimentos
en las islas Canarias.
Sea como fuere, Ojeda
conocía la derrota
y cartas trazadas
durante el tercer
viaje de Colón, y
decidió seguir una vía parecida
aunque más próxima a la línea
ecuatorial, y así a los veinticinco días de abandonar las islas Canarias avistaron el continente
americano, más al sudeste de donde lo había hecho Colón, frente a las
Guayanas, procediendo a costear la tierra firme pasando por el extenso delta del Orinoco en el
Atlántico, para llegar después al Golfo de Paria, dejando
por estribor la isla de Trinidad.
Después de
mantener relaciones pacíficas con
los indígenas de las riberas, siguieron
hacia poniente de la tierra firme, se metieron
por las Bocas del Dragón,
entre aquella isla y la península de
Paria, y ya en pleno Mar Caribe, navegaron a
largo de la costa continental y
se detuvieron en la isla la Margarita,
cuyo interior reconocieron, para
hacerlo más tarde en Chichiriviche, al sur de la isla de Bonaire y no lejos del actual Puerto Cabello,
donde sostuvieron escaramuzas con
los naturales. Pasaron también a la isla
de Curaçao, que bautizaron de los Gigantes, y hacia el 9 de agosto, navegando
entre la isla de Aruba y la península de Paraguaná, hallaron un hermoso golfo
en cuya ribera occidental llamó la atención de los españoles un poblado
palafítico.
El nombre de Venezuela
Fue adentrándose en ese golfo que los aborígenes
llamaban Coquivacoa (entre la península de Paraguaná y la de La Goajira), donde
la expedición vio por primera vez los palafitos (casas con viviendas
construidas sobre estacas hincadas en el fondo del agua), lo que sugirió a
Américo Vespucio, el recuerdo de Venecia, razón del diminutivo Venezuela que
hoy da nombre al gran país sudamericano.
Ha existido siempre cierto debate sobre si fue de la
Cosa o Vespuccio (siempre que aparece este hombre hay algún tipo de litigio) el
que puso el nombre de Venezuela y en tal sentido lo único que cabe afirmar es
que la primera vez que se escribe el vocablo Venezuela para designar el golfo
de Coquivacoa es en el famoso mapa de 1500 (Planisferio), trazado y dibujado
por Juan de la Cosa, un verdadero cartógrafo, a su regreso de la expedición con
Ojeda. Este es el primer mapa de las costas americanas del que se tenga
noticia.
Por el mismo motivo y a pesar de resultar más que
evidente que Ojeda utilizó las derrotas de Colón, se ha de atribuir a
Ojeda el avistamiento de una
zona continental que
abarca aproximadamente desde los 5° de latitud Norte, en el actual territorio de las Guayanas, hasta el delta
del Orinoco, ya observado por
Colón en su tercer viaje, sobre los
9° por encima de la línea
equinoccial; la primera exploración por el interior de la isla Margarita y el descubrimiento de las costas e islas que las cartas
geográficas representan desde
la península venezolana
de Araya hasta
el colombiano cabo de la
Vela. Fue por tanto Alonso de Ojeda el
primer español que puso un pie en la América del Sur.
Muerte de Juan de la Cosa
En 1508 la conocida Junta de Burgos acordó la
colonización de tierra firme, dividiéndola en dos gobernaciones, la de Veragua
(actual Panamá y donde se fundó la primera ciudad americana: Santa María la
Antigua del Darién) y la de Urabá o Nueva Andalucía. La última de estas le
correspondió a Ojeda (Veragua fue para Diego de Nicuesa) y es la actual costa
colombiana comprendida entre el Cabo de la Vela y el Golfo de Urabá.
Ojeda con cuatro barcos y 220 hombres zarpó de Santo
Domingo el 10 de noviembre de 1509 nuevamente en compañía de Juan de la Cosa. Desembarcaron cerca de la actual Cartagena de
Indias siendo atacados por los indígenas en el poblado de Turbaco, resultando
muerto el famoso cartógrafo santoñés Juan de la Cosa. Posteriormente fundaría
el Fuerte de San Sebastián de Urabá, en el Golfo del mismo nombre, siendo éste
el cuarto emplazamiento español en tierra firme.
Ojeda sería nombrado gobernador en dos ocasiones y
tras una agitada vida con más expediciones y conflictos decidió ingresar en el
Convento de franciscanos de Santo Domingo en La Española, donde murió a
principios de 1516.
Fuente: Ignacio del Pozo Gutiérrez, Revista de
Historia
Revisión y Diseño: elcofresito
Comentarios
Publicar un comentario
Todos los comentarios deberán guardar el respeto y la consideración hacia los demás, así como el uso de términos adecuados para explicar una situación. De no cumplirse con estos requisitos los comentarios serán borrados.