POISON GARDEN, EL JARDÍN MÁS VENENOSO DEL PLANETA
Cuesta creer, pero los primeros humanos se
sacrificaron, sin saberlo, en la búsqueda prehistórica para saber qué plantas
eran seguras para comer, cuáles eran adecuadas para curar y cuáles mutilarían o
matarían a quien las tocara. Ahora, la gran mayoría confiamos en expertos para
hacer estas distinciones por nosotros. A menos que estemos entrenados en este
campo, es bastante seguro que ninguno de nosotros tendría la menor idea de
evitar un envenenamiento de la naturaleza.
Sin embargo, esto no tiene por qué
preocuparnos demasiado en una visita al jardín del que vamos a hablar a
continuación. Ubicado en los terrenos del castillo de Alnwick en
Northumberland, Inglaterra, es una de las atracciones más bellas del norte del
país, donde centenas de coloridas plantas invitan a los visitantes a pasear a
través de hileras de rosas fragantes, topiarios cuidados y fuentes en cascada.
Pero dentro de los límites de Alnwick, tras unas puertas de hierro negro, hay
un lugar donde a los visitantes se les dice explícitamente que no se detengan a
oler las flores.
Es Poison Garden, hogar de 100 asesinas
despiadadas.
En este jardín, pueden admirar las plantas con
los ojos, pero no puedes tocar ni oler nada, porque todas las plantas del
jardín son venenosas y posiblemente podrían matarlos. La historia y los
orígenes de semejante atracción son igual de fascinantes que lo que en su
interior se alberga.
En 1995, Jane Percy se convirtió en duquesa de
Northumberland, este condado norteño que se extiende hasta la frontera con
Escocia, después de que el hermano de su esposo muriera inesperadamente. Con el
título llegó el Castillo de Alnwick, la sede tradicional del duque de
Northumberland (y que también sirvió como escenario de Hogwarts en las dos
primeras películas de Harry Potter). Después de que la familia se instalara en
el castillo, el esposo de Percy le pidió que hiciera algo con los jardines, que
en ese momento eran una silvicultura comercial en desuso que no contaba más que
con hileras de árboles de Navidad.
"Debió pensar: 'Eso la mantendrá callada,
plantará algunas rosas y eso será todo'", contaba la duquesa. Pero Percy
hizo más que plantar algunas rosas. En 1996, contrató a Jacques Wirtz, un
arquitecto paisajista que ha trabajado con las Tullerías en París y los
jardines de la residencia del presidente francés, para ayudar a re-imaginar el
jardín de Alnwick. En realidad, quería algo que diferenciara su proyecto de los
otros jardines que salpican la campiña inglesa. "Si está construyendo
algo, especialmente una atracción para visitantes, debe ser algo realmente
único", decía.
La duquesa pensó que podría incluir un jardín
boticario, pero un viaje a Italia la puso en un rumbo ligeramente diferente.
Después de visitar el infame jardín de veneno de los Medici, la duquesa quedó
cautivada con la idea de crear un jardín de plantas que pudieran matar en lugar
de curar. Otro viaje, este, al sitio arqueológico del hospital más grande de la
Escocia medieval, donde la duquesa se enteró de las esponjas soporíferas
empapadas en beleño, opio y cicuta que se usaban para anestesiar a los
amputados durante las cirugías del siglo XV, reforzó su interés en crear un
jardín de letales plantas.
“Esta es una forma de interesar a los niños. A
ellos no les importa que la aspirina provenga de la corteza de un árbol. Lo
realmente interesante es saber cómo te mata una planta, cómo muere el paciente
y cómo te sientes antes de morir", contaba. Así que la duquesa se dedicó a
recolectar plantas venenosas para su imaginado Poison Garden. Mientras seleccionaba
las 100 variedades que terminarían echando raíces allí, solo pedía un requisito
para cada nueva adquisición: las plantas tenían que contar una buena historia.
Esto significaba que asesinos exóticos como Brugmansia de América del Sur se
mezclarían con venenos más comunes, como los setos de laurel.
Lo extraordinario de las plantas es que son
las más comunes que la gente no sabe que son asesinas. Los visitantes a menudo
se sorprenden al saber que el seto de laurel, casi omnipresente en los jardines
ingleses, puede ser altamente tóxico. Pero algunos visitantes han tenido
experiencias con el lado siniestro del laurel. Después de cargar sus autos con
hojas de laurel podadas para llevarlas al basurero, algunos conductores se han
quedado dormidos al volante debido a los gases tóxicos que las ramas emiten.
También hace unos años, siete personas se desmayaron por inhalar estos gases
mientras caminaban por el jardín.
Hay más de 100 plantas en Poison Garden, y
todas son venenosas. El jardín contiene plantas muy peligrosas como la cicuta;
dedalera; Atropa belladonna; y strychnos nux-vomica, que es de donde proviene
la estricnina. También está la planta Rincinus communis, que nos da aceite de
ricino, pero también nos da ricina, que es un veneno. El laurel, que también
vive en el jardín, es una bonita planta que produce cianuro. Aunque, hogweed
puede parecer la planta más desagradable del conjunto. Tocarla desencadena una
reacción fototóxica y quema la piel. Las ampollas causadas por la reacción
pueden durar hasta siete años. El jardinero jefe, Trever Jones, incluso tiene
que moverse por el jardín con un protector facial, guantes y un traje
hermético.
El jardín, además, tiene trampa. Contiene
muchas asesinas que en realidad parecen flores hermosas, como los árboles de
Laburnum, que tienen impresionantes flores amarillas, así como semillas
mortales. Aconitum es otra planta engañosamente mortal. Tiene bonitas flores
azules y bayas venenosas. Las hojas, raíces y tallos también pueden matarte.
El hecho de que el Poison Garden esté lleno de
veneno, literalmente, no impide que la gente haga cola para visitarlo.
Alrededor de 800.000 personas visitan el jardín cada año. Como parte de la
misión educativa, la duquesa cultiva una variedad de drogas, desde cannabis
hasta cocaína, que ella y los guías del jardín utilizan como punto de partida
para la educación sobre las drogas. "Es una forma de educar a los niños
sin que se den cuenta de que están siendo educados", dice.
https://www.youtube.com/watch?v=tboW11dMeKs
Fuente: Ciencia, Albert Sanchis, Magnet
Revisión y Diseño: elcofresito
En donde vivo hay estramonio para acabar con TODA LA HUMANIDAD....¿sería inhumano???es curioso para mí q los rusos suelan asesinar con venenos...
ResponderEliminarEstramonio (farmacología)
Es una planta psicoactiva y sus alcaloides, a partir de determinadas dosis, presentan efectos neurotóxicos. De todas las partes de este vegetal, las semillas son las más tóxicas, ya que más de 30 pueden constituir una dosis letal. Contiene los alcaloides: hiosciamina, escopolamina y atropina.
Dosis tóxicas, con cantidades ingeridas de 5 g de atropina y 4 g de escopolamina para un adulto.
La actividad anticolinérgica de estos alcaloides produce un delirio alucinatorio incontrolable de numerosas horas, cuando no la muerte,....